Llamadme monstruo con corazón de pierda, pero mejor morir con la conciencia sucia que de hipotermia y golpe de rayo.

Seguidores

martes, 13 de diciembre de 2011

Es mejor así

Nadie es quien dice ser, nadie es quien parece ser.
A menudo nos llevamos decepciones con la gente que creemos conocer, y es justo en ese momento en el que te das cuenta que nunca se termina de conocer a nadie.
¿Por qué nos empeñamos en intentar ser quien realmente no somos? Perdemos demasiado tiempo, cuando en realidad lo importante es la esencia de cada uno, las particularidades que nos componen y nos hacen diferentes.
Quizá no siga un prototipo como todas las demás, pero me basta con ser quien soy, sin tener que esforzarme por aparentar.
Al fin y al cabo me quedo con los de siempre, con los míos, toda esa gente auténtica que forman parte de mí, porque todos los que desaparecen de nuestro camino es por algo, algo simple como que es mejor así.



4 comentarios:

  1. Gracias por pasarte por mi blog y dejar tu pensamiento! Ya te he respondido al correo:)
    Esta entrada es genial, me gusta el tema, ser diferente al resto y camuflarse entre los prototipos es algo a lo que estoy acostumbrada, odio a las niñas Barbies, no me gusta pensar en el "que dirán" prefiero el "soy feliz, y qué?"
    xoxo-L

    ResponderEliminar
  2. Siempre siempre es mejor así, lo tengo claro...y si tienen que volver, vuelven, tiempo al tiempo...
    Acabo de descubrir tu blog y te sigo! Estamos en contacto!
    xoxo
    Mónica

    ResponderEliminar
  3. Tus entradas son siempre tan adecuadas con lo que vivo!
    Personalmente me duele mucho cuando una persona te falla, me gustaría tanto poder fijarme simplemente en los que están conmigo día a día...

    Me encanta tu forma de ver las cosas!

    un besito bonita

    ResponderEliminar
  4. Es irremediable: las personas van y vienen en tu vida; nuevas caras van sustituyendo a otras del pasado, y te ayudan a definir quién eres, dónde vas y qué es lo que quieres. Hay algunas de estas personas que pasan por tu vida durante unos instantes, y luego se van, muchas veces sin decir adiós si quiera. Otras cruzan tu vida y te acompañan durante mucho tiempo, pero apenas influyen en tu persona. Hay otras que pasarán sólo unos meses a tu lado, pero que la marca que dejarán en ti es tan profunda, que quedará ahí para siempre. Están también esos que han estado ahí desde que tienes uso de razón, y que te acompañarán hasta el final. Y, por último, están esos que llegan un día, inesperadamente, y que descolocan tu vida completamente. Son esos los que verdaderamente te hacen cambiar, por los que decides dejar todo aquello concerniente a tu vida pasada y empezar una vida nueva. Sin embargo, tanto unos como otros acaban yéndose, por un motivo u otro. Y no queda más remedio que aceptar esta dura realidad, y afrontar que, tarde o temprano, nuestras vidas se verán forzadas al cambio, tanto si estamos preparados para ellos como si no.

    ResponderEliminar